El ejercicio físico juega un papel fundamental en la vida de los niños autistas, especialmente en aquellos como Adrián que presentan hiposensibilidad, tema que ya he abordado aquí. Las actividades que involucran todo el cuerpo, como correr, salta, girar o ir el día de clases de natación le brindan a Adrián la retroalimentación sensorial que necesita para autorregularse.
Incluir a Adrián en actividades físicas más complejas como: hacer barras o levantar mancuernas (siempre con el apoyo de papá o mío), nos ayuda a que comience a familiarizarse con diferentes tipos de ejercicio y a cultivar el hábito desde pequeño, lo llevamos con nosotros cuando entrenamos porque queremos que entienda que el ejercicio es importante y que al igual que otros niños, él aprende mucho observando y replicando lo que ve en casa, sabemos que para él como para cualquier niño, ver a sus padres activos y comprometidos con el ejercicio le transmite ese mensaje de salud y bienestar de una forma natural y divertida.
